El AMD Ryzen 9800X3D ha logrado un hito en el mundo del overclocking. Ha alcanzado los 7.2 GHz gracias al uso de enfriamiento por nitrógeno líquido en una placa base X870E MEG GODLIKE de MSI. Este récord, registrado en HWBOT, destaca el potencial de este procesador en condiciones extremas, aunque no es una práctica viable para el usuario promedio.
Overclocking Extremo en el Ryzen 9800X3D
AMD Ryzen 9800X3D: Superando los 6.9 GHz y llegando a 7.2 GHz
En un nuevo logro para el overclocking extremo, el AMD Ryzen 9800X3D ha sido llevado a 7.2 GHz, superando su anterior marca de 6.9 GHz. Este resultado se consiguió en una plataforma MSI X870E MEG GODLIKE, diseñada para soportar frecuencias extremas y estabilidad en condiciones de alta exigencia.
Uso de Nitrógeno Líquido y Ajustes de Voltaje
El récord de frecuencia fue posible gracias al enfriamiento por nitrógeno líquido. Un método utilizado en overclocking de alto nivel que permite reducir drásticamente la temperatura de la CPU. Durante esta prueba, el voltaje del procesador se ajustó a 1.969 voltios, un nivel significativamente superior al estándar. Además, se deshabilitó el SMT (hyperthreading) para optimizar el rendimiento en un solo núcleo. Este tipo de pruebas demuestra el potencial de la CPU en condiciones controladas, pero no es aplicable a un entorno de uso diario.
Limitaciones y Público Objetivo del Overclocking Extremo
Estos logros en frecuencia son espectaculares, pero no son prácticos para la mayoría de los usuarios. El overclocking con nitrógeno líquido requiere conocimientos avanzados, equipo especializado y acceso a componentes de alto costo, como una tarjeta gráfica de gama alta (RTX 6090) para evitar cuellos de botella en el rendimiento. Para el usuario promedio, el 9800X3D sigue siendo una opción potente, aunque sin necesidad de alcanzar frecuencias tan extremas.
El overclocking del AMD Ryzen 9800X3D hasta los 7.2 GHz representa un avance impresionante en el ámbito del rendimiento extremo. Si bien estos resultados no son aplicables al uso cotidiano, reflejan el potencial de las nuevas tecnologías de AMD y las capacidades de enfriamiento de última generación. Este tipo de hitos inspira a entusiastas y profesionales a explorar los límites de sus equipos, aunque es importante recordar que el overclocking extremo requiere experiencia y no es recomendado para el usuario promedio.