Amazon ha anunciado que el lanzamiento de su renovada asistente de voz, la nueva Alexa con inteligencia artificial, se aplaza hasta 2025. Esta noticia ha sorprendido a muchos, ya que se esperaba que la actualización de Alexa con IA estuviera disponible este año.
La nueva Alexa con IA prometía interacciones más naturales y una inteligencia similar a la de ChatGPT. Sin embargo, según informes recientes, el desarrollo ha enfrentado significativos desafíos técnicos. Usuarios que probaron la versión beta reportaron respuestas lentas, errores en la integración con dispositivos inteligentes y «alucinaciones», donde Alexa proporcionaba información irrelevante o incorrecta.
Desafíos en el desarrollo
Uno de los principales problemas parece ser la integración de modelos de lenguaje avanzados en un asistente que necesita realizar tareas sencillas, como configurar temporizadores o controlar luces inteligentes. La nueva Alexa mejora en respuestas complejas, pero pierde eficacia en funciones básicas. La falta de un evento importante de Amazon este otoño y la eliminación de la opción beta «Let’s Chat» confirman los problemas en el desarrollo. Mientras trabajan en el desarrollo, el enfoque sigue siendo lanzar una Alexa con IA avanzada.

Andy Jassy, CEO de Amazon, mencionó que están «reconstruyendo el cerebro de Alexa», pero aún no hay claridad sobre cómo beneficiará esto a los usuarios. Panos Panay, exjefe de Surface en Microsoft, se unió a Amazon para liderar la división de dispositivos. Su enfoque en diseño y calidad podría ser clave para superar estos obstáculos.
Pero si otros ya la tienen…
Mientras Amazon enfrenta estos desafíos, competidores como Google Assistant y Siri continúan mejorando sus propias asistentes. La espera hasta 2025 podría ser un riesgo para Amazon, permitiendo que otros avancen en el mercado de asistentes de voz. Aunque el objetivo es crear un asistente al estilo de la computadora de «Star Trek», todo indica que una Alexa realmente inteligente aún está lejos de hacerse realidad. La integración de Alexa con IA podría ser la clave para alcanzar esa meta.
La comunidad tecnológica espera con interés cómo Amazon resolverá estos problemas. Por ahora, los usuarios deberán conformarse con la versión actual de Alexa, que, si bien es funcional, carece de las mejoras prometidas.