La marca china ha presentado la Redmi K Pad Golden White Edition, una versión renovada y brillante de su tablet compacta más potente. Coincidiendo con el lanzamiento de los Redmi K90 y K90 Pro Max, esta actualización llega para darle un aire premium a un dispositivo que ya competía de tú a tú con el iPad mini. Pero… ¿qué cambia exactamente en esta nueva versión?
Un lavado de cara con alma de flagship
Aunque el hardware se mantiene, la Redmi K Pad Golden White Edition presume de un acabado metálico que no solo brilla, sino que protege mejor contra la corrosión. Su cuerpo de 205.1 x 132 x 6.5 mm y peso de 326 g sigue siendo uno de los más cómodos para usar con una mano o llevar en una mochila ligera.
Como decimos, mantiene el chip MediaTek Dimensity 9400+, que ofrece potencia de sobra para juegos y multitarea, acompañado de 12 GB o 16 GB de RAM y hasta 512 GB de almacenamiento. En pantalla, la apuesta continúa con un panel IPS de 8.8 pulgadas, ideal para consumir contenido o tomar notas rápidas.
Un refresco, opcional, pero atractivo
La Redmi K Pad Golden White Edition parte desde CNY 2,999 (365 euros al cambio) para la versión de 12 GB + 256 GB, y sube a CNY 3,399 (410 euros) si se opta por 16 GB + 512 GB. Por ahora, no hay confirmación de lanzamiento global, aunque los rumores apuntan a que podría llegar como una Xiaomi Pad Mini Golden Edition en los próximos meses.
Además, su compatibilidad con el ecosistema MIUI Pad y los accesorios de la marca, como el Redmi Stylus o el teclado magnético, la convierten en una opción muy tentadora para estudiantes, creativos o viajeros frecuentes.
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