El Raspberry Pi 5 sigue ampliando sus posibilidades con un nuevo accesorio oficial: el M.2 HAT+ Compact, un adaptador que permite instalar un SSD NVMe en formato 2230 dentro de la propia carcasa oficial de la placa. Una mejora pequeña en tamaño, pero enorme en comodidad, que promete dar más juego a los entusiastas de este miniordenador.

Un accesorio pequeño que cambia mucho la experiencia

La gran novedad de este accesorio está en su diseño compacto. A diferencia del M.2 HAT+ original, el nuevo modelo integra el cable flexible en la propia placa y reduce su tamaño para que encaje perfectamente en la caja oficial del Raspberry Pi 5. Eso sí, este ajuste implica una limitación: solo admite SSD M.2 2230, más pequeños que los habituales 2242 o 2280.

En términos de velocidad, la conexión se mantiene en PCIe 2.0 x1, con transferencias de hasta 500 MB/s. No es comparable a un PC de sobremesa, pero supone una mejora notable frente a las tarjetas microSD tradicionales y abre la puerta a un uso mucho más fluido para servidores caseros, emulación o proyectos DIY.

Por otro lado, el modelo anterior sigue teniendo ventaja en compatibilidad con módulos más largos, lo que puede ser clave para quienes necesiten más opciones de almacenamiento. Sin embargo, para quienes valoren la estética y portabilidad del equipo en su caja oficial, el nuevo Compact es la elección clara.

Precio, disponibilidad y por qué importa este lanzamiento

El nuevo M.2 HAT+ Compact ya está disponible en distribuidores oficiales por unos 22 dólares, frente a los 15 dólares del modelo original. Ambos convivirán en el mercado al menos hasta 2032, lo que asegura soporte a largo plazo para la comunidad maker.

Con este lanzamiento, Raspberry Pi consolida su estrategia de ofrecer accesorios oficiales que compitan directamente con las alternativas de terceros, pero con la ventaja de estar diseñados a medida. La jugada es clara: dar al usuario más flexibilidad sin perder la experiencia integrada que caracteriza a la marca.

En cuanto a colores y formatos, la placa se ajusta al estilo sobrio habitual de Raspberry Pi, y al ser un componente interno no busca destacar estéticamente. Lo más interesante es que permite seguir usando la carcasa oficial sin modificaciones caseras, algo que muchos usuarios agradecerán.

M.2 HAT+ Compact para Raspberry Pi 5, precio de 22 $, soporte solo para SSD 2230, disponible ya en distribuidores oficiales y con garantía de continuidad hasta 2032. Una actualización pensada para quienes buscan mantener su Pi ordenado, compacto y rápido.

Porque sí, a veces las mejores mejoras no son las más grandes, sino las que caben dentro de una caja tan pequeña como la del Pi.

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