Este nuevo modelo, la Super X, es un heredero directo del OneXPlayer X1 Pro, pero apostando por el Strix Halo de AMD, una arquitectura pensada para reventar límites.
¿Una portátil con alma de sobremesa?
La gran bomba es la elección del procesador: el Ryzen AI Max+ 395, con 16 núcleos Zen 5 y una gráfica integrada Radeon 8060S con 40 unidades de cómputo RDNA 3.5. Según determinados benchmarks, esta GPU integrada rivaliza con la RTX 4070 para portátiles (aunque en muchas ocasiones, con la 4060), algo impensable hasta hace poco en un formato tan compacto.
Además, la Super X promete un rendimiento sostenido de hasta 120 W. Rendimiento que vendrá refrigerado por una cámara de vapor que recuerda a los sistemas de disipación de los ultrabooks más premium.
Frente al modelo anterior, el X1 Pro, no solo gana músculo, sino también pantalla. OneXPlayer abandona el IPS y se lanza a por un panel AMOLED con resolución 2.8K. A ello le acompaña una tasa de refresco variable y un diseño ultrafino de 12,5 mm de grosor, todo en un cuerpo de aluminio.
Y aquí la cereza que le da el alma de sobremesa
Lo más curioso es que el vídeo teaser sugiere un diseño convertible, al estilo de un 2-en-1, con posibilidad de usarlo como tablet o apoyado con teclado. Aunque OneXPlayer no ha confirmado todos los detalles, ya hay hype por lo que se viene.
Tendrá también puertos bien surtidos, acabados premium y se espera que entre pronto en fase de pruebas. Nada de precios ni fechas aún, pero si mantiene la estrategia del X1 Pro, lo veremos en Amazon antes de lo que imaginas.
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