One-Netbook vuelve a la carga con el OneXFly Apex, una consola portátil que mete en el bolsillo una potencia que hace temblar (aunque no es la primera vez que sucede).
Una pantalla que pide pelea (y que te hará dudar si es portátil)
Lo primero que salta a la vista es su panel de 8 pulgadas en formato horizontal nativo, con soporte para VRR a 120 Hz. Es grande, es fluido y está pensado para que los juegos de PC se vean sin tearing ni parpadeos molestos.
Por dentro, late un AMD Ryzen AI Max Pro 385 o el aún más potente Ryzen AI Max+ 395, con configuraciones de 32, 64 y hasta 128 GB de RAM. Sí, has leído bien: 128 GB en una portátil, mucho más de lo que montan muchos portátiles gaming de gama alta.
Además, la máquina viene con un TDP de 120 W acompañado de un sistema de refrigeración reforzado. Esto la coloca muy por encima de rivales como la Aokzoe A1X y la acerca peligrosamente a lo que ofrece un mini-PC de escritorio.
Batería XXL, gatillos ajustables y memoria para rato
El hardware no se queda solo en CPU y pantalla. La OneXFly Apex trae una batería de 85 Wh, pensada para aguantar sesiones largas sin depender del cargador. También incorpora gatillos ajustables, un SSD M.2 y hasta ranura para Mini SSD.
La compañía no ha olvidado su ambicioso Super X (ese 2-en-1 estilo ROG Flow Z13), pero ha preferido apostar primero por la consola que más ruido puede hacer en foros y directos de Twitch.
De momento, no hay fecha exacta de lanzamiento global, aunque la marca asegura que estará “disponible pronto”.
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